Durante una sesión de preguntas y respuestas con los aprendices del IEJ sacamos una lista de cosas que han impactado durante nuestros ministerio (como jóvenes y como líderes). Aquí te dejamos algunas Ideas para el ministerio juvenil.
- Pasar tiempo de calidad que sea fuera de la Iglesia, o fuera del programa común de lo establecido.
Ideas: camping en un fin de semana. - Hacer sentir a los chicos que son “interesantes” o “importantes”, involucrarte, preguntar, indagar. Hacerles ver que no son solo chicos que asisten a la iglesia.
Ideas: sonrisas!!! Abrazos, palabras de amor. - Cercanía, invitaciones constante si vemos que están solos. Estar al pendiente de las necesidades de los chicos. Mostrar el verdadero significado de amar al prójimo.
- Expresiones de afecto desde el primer momento que les conoces, sin importar su apariencia.
Ideas: un diploma y un pequeño regalo de bienvenida. - Bajarse del papel de “el líder” y poner las necesidades de los chicos antes que la tuyas, hacerles ver que no son un numero, son alguien especial y que nosotros no somos “inalcanzables”.
- Involucrar a los chicos en las actividades, hacerlos parte de lo que se lleve a cabo, aun cuando sean muy jóvenes. Poniéndolos en acción y desafiarlos les motiva a involucrarse mas en el ministerio.
- Ser modelo a imitar, potencializar a los chicos, haciéndoles ver lo que pueden llegar a ser.
- Dar una bienvenida que sea memorable, que es especial y que les alegra mucho su asistencia.
- Estar al pendiente de la situación de los jóvenes, e involucrarles con la familia.
Ideas: cena de navidad, año nuevo o cumpleaños. - Enseñar de otras cosas que sean fuera de lo común en la Iglesia.
Ideas: aprender otro idioma, compartir revistas, videojuegos… - Creer en los jóvenes, en su potencial. Ser consistente en pasar tiempo fuera de la iglesia o platicar de lo común de la iglesia.
Ideas: ir a sus juegos deportivos, a logros de la escuela…
- Crear un equipo de trabajo donde delegues tareas o actividades, pero además ministrar.
- Invitar gente a tu casa.
- Aprenderte todos los nombres de los chicos. (visita www.gist.com o picasa que dan herramientas para reconocer rostros)
- Generar salidas que fomenten la convivencia.
- Involucra a otros en lo que son tus pasiones.
- Convencerles de el gran valor que tiene la Biblia, ser de ejemplo, vivirlo.
- De ser necesario volver a los fundamentos bíblicos.
- Conectar el mensaje bíblico a la situación real de los chicos, ayudándoles a ver que la Biblia es aplicable a la actualidad.
- Ser repetitivos en la frases típicas “lee la biblia” o “debes orar” o dar mensajes como escuelita dominical.
- No preparar bien el mensaje, no saber bien de lo que hablas o lo que vas a exponer.
- No vivir lo que dices, hablas y hablas pero no lo aplicas.
- No cuidar las bromas que haces a los demás, intenta que sean positivas, y si llegan a ser negativas mejor que sean dirigidas hacia ti.
- Romper la confidencialidad, contar a otros lo que hablas a los chicos.
- Improvisación, mala organización, tratar de organizar de un día para otro.
- No ser genuino, intentar vestirte como los chicos puede ser contraproducente.
- No hacer participar a los chicos durante el mensaje, mejor trata de que entre todos se trate el tema y expongan opiniones.
- Ser hipócritas o no ser transparentes, los chicos ya saben cuando fingimos o cuando caemos. Nosotros debemos admitir que también tenemos luchas y que somos “humanos”.
A propósito del tema, cuentanos en los comentarios o en facebook ¿Qué cosas realmente impactaron tu vida cuando estabas en el ministerio juvenil como asistente?
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